El acné es un problema común de la piel con varios tipos. Estos son algunos tipos comunes de acné:
Acné comedónico (puntos negros/puntos blancos)
Apariencia: Los comedones son la característica principal, y son tapones compuestos de sebo, células cutáneas muertas, etc. Se encuentran frecuentemente en la nariz, las alas nasales, los pliegues nasolabiales y el mentón. Se presentan como protuberancias ligeramente elevadas con residuos blanquecinos visibles en los poros dilatados.
Gravedad: Leve, afecta la estética hasta cierto punto.

Acné papular
Aspecto: Las pápulas son pequeñas protuberancias sólidas, del tamaño de una semilla de mijo a un guisante (de 1 a 5 mm de diámetro). Se encuentran comúnmente en la frente, las mejillas, el mentón y las sienes. Son de color rojo intenso o rojo claro y tienen una textura firme. Algunas pápulas pueden presentar un comedón o un tapón sebáceo no ennegrecido en la parte superior.
Gravedad: Leve a moderada; el cuidado inadecuado puede provocar pústulas.

Acné pustuloso
Aspecto: Las pústulas son granos rojos grandes que parecen guisantes, granos de arena o ampollas. Suelen aparecer en las mejillas y son consecuencia del acné papular. Presentan una parte superior hinchada y llena de pus blanco, y son propensas a romperse. Un manejo inadecuado puede provocar hiperpigmentación postinflamatoria y cicatrices.
Gravedad: Moderada, generalmente acompañada de pápulas; un área más grande aparece roja.

Acné nodular
Aspecto: Los nódulos son bultos grandes (de unos 5 mm) de color rojo oscuro y duros. Algunos nódulos pueden ser violáceos o marrón oscuro. Suelen aparecer en las mejillas y a lo largo de la mandíbula. Generalmente, no presentan pústulas visibles, pero pueden contener pus, restos bacterianos, restos de ácaros, sebo y queratina. Al presionarlos, causa dolor.
Gravedad: Moderada a grave; infecciones más profundas pueden alcanzar la dermis.

Acné quístico
Aspecto: Los quistes son lesiones grandes, redondas u ovaladas. Suelen aparecer en las mejillas, el mentón y la mandíbula. Pueden ser del tamaño de una semilla de soja o incluso más grandes. Al apretarlos, la cabeza se ve negra, mientras que el cuerpo es blanco amarillento, translúcido y lleno de sebo. Al tacto, se sienten fluctuantes, con producción continua de pus.
Gravedad: Grave; difícil de curar, propenso a cicatrices, requiere atención médica inmediata.

Estas descripciones representan casos generales, y los tipos específicos de acné pueden variar. Es importante comprender el acné para abordarlo adecuadamente. Sin embargo, si el acné es grave, se recomienda consultar a un dermatólogo en un hospital para recibir tratamiento oportuno.