Maquillaje base perfecto: crear un tono de piel uniforme y duradero

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El maquillaje de base juega un papel crucial en el proceso de maquillaje. Proporciona beneficios como lograr un tono de piel uniforme, prolongar la duración, proteger la piel y mejorar su textura.

Paso 1: Cuidado de la piel antes del maquillaje
Limpieza → Tónico → Esencia → Hidratante/Crema → Protector solar
Primero, limpia a fondo el rostro para eliminar la suciedad y la grasa. Luego, usa un tónico o agua facial para cerrar los poros, equilibrar el pH de la piel y prepararla para los siguientes pasos del cuidado. Antes de aplicar la base de maquillaje, usa una crema hidratante, loción o sérum hidratante para hidratar la piel, lo que mejora la adherencia del maquillaje y prolonga su duración. Recuerda dejar que cada paso del cuidado se absorba completamente antes de continuar con el siguiente para evitar la formación de bolitas. Aplicar protector solar es esencial para reducir los daños causados por los rayos UV y el fotoenvejecimiento.

Paso 2: Imprimación
Aplica la prebase en el rostro y aplícala con toques suaves con las yemas de los dedos. Este paso protege la piel del maquillaje, el polvo y las bacterias, además de corregir el color e iluminar.

Paso 3: Corrector
Elige un corrector que combine con tu tono de piel. Por ejemplo, usa un corrector naranja para ojeras azuladas, o un tono más oscuro que tu tono de piel para ojeras moradas o marrones (evitando las arrugas bajo los ojos). Para imperfecciones y cicatrices de acné, elige un tono más oscuro que tu tono de piel. Para los surcos lagrimales y los pliegues nasolabiales, elige un tono más claro que tu tono de piel. Antes de aplicar el corrector, caliéntalo con las yemas de los dedos y aplícalo con pequeños toques en las zonas a tratar. Luego, da golpecitos con una brocha para corrector para difuminarlo. Esta técnica evita una apariencia pesada y pastosa. Si aún quedan zonas que necesitan más cobertura, usa un corrector en lápiz para retoques precisos.

Paso 4: Líquido/Base
Elige una base líquida o en crema que se adapte a tu tipo y color de piel. Usa una esponja, una brocha o las yemas de los dedos para aplicar la base uniformemente en el rostro, procurando que se difumine uniformemente en el cuello y la línea del cabello.

Paso 5: Configuración
Este paso garantiza la durabilidad y la adherencia de la base de maquillaje. Puedes usar sprays fijadores o polvos sueltos para fijar el maquillaje.

La base de maquillaje proporciona una base sólida para el resto del maquillaje, creando un look impecable y duradero, a la vez que protege la piel de las agresiones externas. Es fundamental elegir bases de maquillaje que se adapten a las necesidades específicas de tu piel.